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Pasos



Mientras el desvió va quedando atrás, de su desgastada sombra se preguntaba si ese camino alternativo que había tomado era un escape o simplemente un engaño para continuar. 

De cada uno de los olores del paisaje un recuerdo guarda en su pequeña cajita de colores. De cada piedra se acuerdan las heridas de sus pies, pero sin duda de las oscuridades de las luces aún no pudo despegarse.

Para adelante sigue el Caminante, el destierro ya no lo desvela, porque sabe que ni a las bestias ni a los viejos personajes se los volverá a cruzar. Lejos de la aldea sólo carga con esa brillante llave, que nunca va a usar. 

Mientras que con los cielos de cada pasaje se iba reconciliando algo sucedió, silencios de voces calladas escuchó. De la niebla siempre desconfió, pero a partir de ese momento supo que no era un mero obstáculo sediento por hacer que pierda su rumbo. 

En esa brillante noche, la espesa niebla, una frase a sus pies regaló. Le dijo que era de su madre y que cada palabra que escuchaba era un silencio menos que gritaba.

Paso por paso, cada enunciado lo invitaba a descansar.

En el cotidiano andar lo sintió. Por un momento percibió que el resplandor de una noche se apagaba, que la niebla faltaba, y que el silencio callaba. En una hoja de parra con sus dedos un mensaje escribió:

"En el día al que le alcanzó el ayer
con tu frase no me tropecé.Mientras mañana va siendo hoy,despertaré pensando
cual será la palabra en la que caeré"

En la rama que estaba al costado del camino dejó el mensaje y su camino retomó. Paso por paso iba preguntándose, en que momento, volverá escuchar al misterioso silencio su frase gritar.

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